Bronce - 47 x 27 x 24 cm - 13,5 kg
Eurídice – de Catalina de Kerhor
Con "Eurídice", Catherine de Kerhor revisita un mito antiguo con una sensibilidad contemporánea, infundiendo a la legendaria figura femenina una nueva profundidad y una presencia tangible. Esculpida en bronce, Eurídice está representada sentada sobre el tocón de un árbol, con la mirada pensativa y la mano delicadamente colocada bajo la barbilla, como absorta en pensamientos lejanos. Su postura expresa a la vez una suave melancolía y una fuerza interior, encarnando la dualidad de su condición mítica, compartida entre el amor y la pérdida.
Los delicados detalles del bronce, desde la sutil textura de su vestido hasta los finos mechones de su cabello recogido, están trabajados con notable delicadeza. La pátina oscura y matizada añade profundidad emocional a la obra, enfatizando los contrastes entre luz y sombra, vida y muerte, esperanza y desesperación. Cada ángulo revela un nuevo lado de Eurídice, ofreciendo al espectador una experiencia de contemplación rica y cambiante.
Kerhor, a través de su habilidad para manipular la materia, captura aquí un momento suspendido en el tiempo, un momento en el que Eurídice parece dudar entre el pasado y el futuro. Su expresión suave e introspectiva, su cuerpo ligeramente inclinado hacia adelante, sugieren una expectativa, una esperanza silenciosa. El artista consigue congelar esta tensión emocional, transformando el frío bronce en una poesía de sentimientos y recuerdos.
Al integrar "Eurydice" a tu espacio, invitas a una obra que habla de resiliencia y meditación, de la belleza en la tristeza y la fuerza que se encuentra en la reflexión. Esta escultura se convertirá en un punto focal, una invitación constante a explorar las profundidades del alma humana y las historias eternas que nos conectan a todos. Déjate seducir por la gracia silenciosa de Eurídice y deja que ella enriquezca tu interior con una elegancia eterna.
