TIBURÓN CEMENTERIO

Bronce plateado, tiburón mako con amalgama de calaveras y huesos en el vientre. Fundición Paumelle

Graveyard Shark de Thierry Benenati es una obra poderosa que combina la fuerza bruta y la fragilidad de la existencia en una representación tan sorprendente como inquietante. Este tiburón Mako, con su silueta esbelta y formidable, se convierte aquí en portador de la muerte, con su vientre estallando en una macabra pila de cráneos y huesos.

Llama la atención el contraste entre la superficie lisa y plateada del tiburón y la textura rugosa de los restos humanos insertados en su cuerpo. El metal pulido, casi como un espejo, refleja la pureza despiadada del depredador, mientras que los cráneos parecen emerger de las entrañas del océano como reliquias de un cementerio submarino, recordando la violencia natural e inevitable de la cadena alimentaria.

Montada sobre una base refinada, esta escultura parece flotar sobre la superficie, congelada en una eternidad helada. Con Graveyard Shark , Benenati no representa simplemente un simple tiburón; crea una alegoría de la vida y la muerte, una obra que nos invita a reflexionar sobre el delicado equilibrio entre depredador y presa, entre belleza y horror.

Con un precio de 48.000 euros, esta pieza única en bronce plateado, fundida en la Fonderie Paumelle, es una espectacular incorporación a cualquier colección que busque traspasar los límites del arte contemporáneo y al mismo tiempo confrontar al espectador con sus propios miedos y fascinaciones.