selena

En “Selena”, Sabina Qaja captura la serenidad y la introspección en un retrato al carboncillo delicadamente dibujado. Esta obra de 50 x 64 cm, realizada en carboncillo blanco, nos presenta el perfil de una mujer, congelada en un momento de profunda calma. El juego de contrastes entre sombras y luces resalta la suavidad de sus rasgos, mientras que el fondo minimalista, casi abstracto, acentúa la atmósfera meditativa de la obra.

Con “Selena”, Sabina explora la sutileza de las emociones humanas a través de una cuidadosa observación. La mirada de la mujer, vuelta hacia el horizonte, destila fuerza y ​​vulnerabilidad. El uso del carboncillo permite al artista dar vida a delicados matices, transformando este retrato en un verdadero estudio psicológico y poético.

Para cualquier fanático del arte figurativo, 'Selena' es una pieza que añade un toque de elegancia y consideración a cualquier espacio. Esta obra encarna la capacidad de Sabina para capturar la esencia de su tema con notable sensibilidad, haciendo que cada rasgo sea tan íntimo como inolvidable.